miércoles, junio 3

Caldo de cultivo




Miércoles. Cita al Médico. 8:00 a.m.

Acudiendo como paciente deseando el alta médica respecto los últimos inconvenientes de salud, pedí al taxista que tomara constituyentes para rodear el tráfico que debía estar sucediendo en reforma y periférico. El tiempo me apremiaba pues sabía que habría considerable atolladero. Agradezco la intervención divina por ponerme en el camino un hábil trabajador del volante y no de uno de esos improvisados que con voz lacónica afirman, casi ordenando, "usted me dice porque no conozco por aquí". Llegue a la cita y todo salió como debía. Sin embargo, en el camino exisitieron algunas cosas que llamaron mi atención.

La primera fue la afable plática con el taxista del día, 28 años de experiencia lo respaldan y pudo darme un perfecto recuento histórico de como los taxis en la década de los 70 no superaban los 15 mil; efectúo rápidamente el ajuste mental y me afirmo, sin temor a equivocarse, que en 1982 ya se contaban por números cercanos a los 50 mil. Y entonces el dato duro, "hoy somos más de 250 mil, ya no hay pa donde". Conoce el oficio, el mercado y la competencia. Me planteó el balance para entregar cuenta y obtener pasaje.

Mi mente trataba de ajustarse al discurso sobre la distribución y número del parque vehicular citadino, cuando se dejó venir frente a mis ojos la siguiente situación. Camiones de pasajeros, tipo turismo, con pancartas como "Fulanito Menganito Sutanito es inocente, todo tu municipio te espera", "Libertad a los presos encarcelados injustamente". De sopetón llegaron al D.F. todos los "apoyos", supuestamente manifestación ciudadana con "apoyos voluntarios", para reclamar la liberación de aquellos agarrados en el michoacanazo.

Nuevamente, se despertó en mi esa sensación que tiende a confirmarme que el narcotráfico tiene en México el mejor caldo de cultivo a diferencia de otras latitudes, inclusive de países seriamente afectados. Esta es tierra fértil en donde su semilla y miles de retoños se dejan crecer como verdolagas, como dice la canción "nomás le pones tantito y crece como una plaga". Hoy estamos inmersos en una lucha frontal encabezada por el gobierno, situación que tiene detractores y defensores quienes aunque usted no lo crea no pueden ponerse de acuerdo. Pero nadie debate la lucha contra el meollo del asunto.

¿Por qué mi patria es caldo de cultivo para esta gran peste del siglo XXI? He concluido con algunas ideas, muchas de ellas antes ya se me ha dicho y las he discutido y comentado con otras personas.

1. Corrupción e ilegalidad son bandera de todos los días en todos los frentes. La mayoría de los mexicanos no están dispuestos a pagar el costo de la vida "derecha". Todos quieren encontrar el camino más fácil y permanecen en un laberinto indescifrable, pues el camino fácil te lleva siempre a vereditas y atajos que sólo entorpecen el arribo al destino pretendido.

La política mexicana está imbuida de intereses ligados al narcotráfico. Es necesario depurar dicha situación y eso podemos hacer los ciudadanos mediante el voto, la exigencia de cuentas y la observación diaria de los pronunciamientos, discursos y promesas electoreras de los candidatos. Hay que cerrarles la pinza mantenerlos bajo vigilancia ciudadana constante.

2. La falta de seriedad con que se aborda el tema le brinda un toque especial. Hoy en día, ante el banquete electoral del 5 de julio donde todos quieren servirse con cuchara grande se proponen debates para legalizar las drogas, y no hay más grande estupidez que esa. Ningún partido que propone esta aberración nos ha explicado cómo demonios invitará a los narcos consagrados a pasarse al lado legal. No creo que alguno de ellos quiera entrar a la libre competencia, al mercado abierto. Este negocio, así como es, ilegal y a oscuras, les brinda millones y millones de dólares anuales. ¿De verás creen que van a inscribirse en el SAT, abrir su empresa, pagar cuotas del seguro social? ¿Proponen a caso qué, para empezar con esto, el gobierno se encargue de producir y repartir como si la droga fuera leche de diconsa? ¿Cómo le van a hacer para legalizar a los asesinos y sicarios que trabajan para el narco? ¿Proponen amnistía contra esta gente que de buenas a primeras no puede ser considerada más que como traidores a la patria?

3. La falta de participación de los ciudadanos pone el remache y último ingrediente para lo que vivimos hoy. Y ¿cómo puedo evitar el narcotráfico? me han preguntado alumnos y alumnas de educación secundaria, así como sus padres. La respuesta no les deja satisfechos, y puede que a mis tres lectores tampoco, pero hay que decirla.

La única manera de evitar el narcotráfico es evitar la ruptura de la legalidad. Si cada ciudadano se mantuviese dentro de un orden legal otro gallo nos cantara. Sé que esto es complicado y difícil. Pero puede aterrizarse en el orden práctico. Si tu no quieres que el narcotráfico continúe expandiéndose procura tener una vida ordenada y motivar a los que te rodean a que la tengan.

Podríamos hablar de cosas sencillas:
  1. No consumas drogas, hay mil maneras de encontrar alivio a tus problemas, preocupaciones o angustias. Busca, infórmate, conoce lo que puede pasarte y piensa si quieres eso en tu vida.
  2. No compres pirateria de cualquier tipo, especialmente cd´s y películas en DVD.
  3. No compres cosas que consideres, creas o sospeches que son robadas.Especialmente autopartes.
  4. No le des dinero a los acomodadores de coches en las calles, si quieres ahorrar guárdate lo que gastas en cigarros o cervezas y paga un estacionamiento qué, ademas te puede cubrir daños o percances.
  5. No des dinero a gente en la calle, junta lo que les darías y apoya a Organizaciones de la Sociedad Civil que brinda protección a los desamparados, y que te informen lo que hacen con tu donativo.
  6. Cumple como ciudadano, analiza opciones de candidatos y partidos, vota por quien más se acerque a lo que tú piensas, paga impuestos, cumple con las normas de cualquier tipo. En especial, pon atención a lo que dice la gente. Si alguien tiene sospechas de narco, no votes por él aunque tenga la mejor campaña y el mejor recurso. Fíjate en sus ideas y en cómo las expresa, eso puede ayudarte.
  7. No des mordidas, sobornos o dádivas a funcionarios públicos o empleados empresariales con tal de conseguir favores o evitarte multas. Si hay multa, es porque algo no hiciste adecuadamente. Asume tu responsabilidad.
  8. Conoce a tus vecinos y participa con ellos para mejorar tu entorno.
  9. Denuncia en forma anónima al 089 cualquier delito de orden federal
Yo por lo menos, procuro cumplirlo y cada día es un nuevo reto. Como se dice en AA "hazlo, sólo por hoy". No es tan difícil como puede pensarse.

Imagen obtenida en http://www.mycology.adelaide.edu.au/gallery/photos/aspergillus12.gif

1 comentario:

  1. De acuerdo, no formar parte del problema que nos aqueja es un buen comienzo. Lo que es incongruente es que sea una sociedad acostumbrada a no respetar leyes, la que se sorprenda por la ola de violencia e ilegalidad en la que vivimos. Así que como siempre, la talacha empieza desde cada uno.


    Besos

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Lo mío ya fue, ¿tú qué dices?